Especialmente para ti

Por Javier:

Siempre quise escribirte algo especial, quiero explicarte con toda la tranquilidad porque hoy puedo gritar al cielo que estoy agradecido con la vida de haberte conocido, y porque estoy tan enamorado de ti y sobre todo porque quiero una vida a tu lado… empezaré desde el principio…

Recuerdo la primera vez que te conocí, sin ni siquiera saber nada de ti, tan solo el verte me causó una gran impresión, en ese instante tú mirada le dio un toque a mi alma, quizás como dándome una señal de que tú eras quien siempre había anhelado tener a mi lado, en ese momento no le di importancia,  pensé que solo era una tonta ilusión mía, pensé que solo eras una hermosa persona que por simple casualidad había conocido.

Después, en el momento menos esperado y por cosas del destino, pude hablar contigo; mi corazón y alma se inquietaban tan solo de verte, pero yo no les hacía caso, seguía creyendo que la vida a mí no me había contemplado para poder conocer a una persona especial que pudiera enamorarse de mí, seguía creyendo que jamás alguien se iba a enamorar verdaderamente de mí, y le decía a mi alma y corazón, tranquilos no se ilusionen en esta vida no tendremos la dicha de sentir el amor verdadero, quizás sea en la otra, y seguí pensando que solo eras una hermosa persona que por simple casualidad había conocido.

A pesar de que yo seguía creyendo que era una casualidad haberte conocido, me dieron ganas de entrar a tu vida, me dio curiosidad por saber más de ti, porque mi alma y corazón me seguían dando señales de que tú eras especial. Con el tiempo nos abriste las puertas de tu casa, y comenzamos a convivir, y poco a poco fui descubriendo la maravillosa persona que eres, comencé a admirarte, poco a poco fui viendo en ti todas tus virtudes y defectos, pero también comencé a descubrir en ti cosas que las demás personas nunca han querido ver en ti, me sentí asombrado al descubrir que en el mundo si existen personas maravillosas, ángeles que por algún motivo Dios manda a la tierra.

Entre más estaba cerca de ti, más te admiraba, más me asombraba, y comencé a enamorarme de ti, me encantó tu increíble capacidad que tienes de sonreír ante la adversidad y de hacer hasta lo imposible por que las personas que quieres se sientan contentas aún por encima de tus gustos, intereses y sentimientos, esto me hizo admirarte cada vez más y más.

Comencé a admirar tu capacidad de proteger a las personas que amas con gran decisión y valentía, comencé a admirar como te desvives por buscar la felicidad de tus hijos, comencé a admirar como enfrentas las cosas malas de la vida, comencé a admirar como eres capaz de quedarte sin pan para comer solo por compartir con otras personas, comencé a admirar que siempre buscas hacer todo lo que está a tu alcance para ver felices a las personas que te rodean, comencé a admirar que eres generosa, bondadosa, amable, agradecida, respetuosa, carismática,  trabajadora, decidida, valiente, pero sobre todo admiro tu generosidad, tu capacidad de dar sin esperar recibir nada a cambio. Además quiero decirte que aparte de todas tus virtudes que tienes como persona eres también físicamente hermosa, tienes un cuerpo femeninamente perfecto, tienes una sonrisa inmensamente hermosa, una cara preciosa, eres una mujer que por donde quiera que te vea para mí eres totalmente hermosa.

Poco a poco te fuiste metiendo en mi corazón, te fuiste adueñando de mi alma, y a pesar de que yo me enamoré profundamente de ti, no me atrevía a decirte nada porque yo jamás me imagine poder llegar a ser alguien especial para ti, jamás me imagine que tu sentías lo mismo por mí,  era para mí imposible creer que una mujer tan especial como tu pudiera enamorarse de mí, muchas veces tus ojos me daban señales, pero aun así era muy difícil para mí creer que tu podías estar enamorada de mí.

No había hora del día en la que no pensara en ti, por las noches te soñaba, no solo te fuiste adueñando de mi alma si no que te fuiste tatuando en ella, me encantaba llamarte por teléfono y escuchar tu voz, porque cuando tenía problemas y escuchaba tu voz sentía paz y tranquilidad en mi corazón, me encantaba, me encanta y me seguirá encantando toda la vida escuchar tu voz, porque cuando estoy molesto tu voz me tranquiliza y cunado estoy deprimido tu voz me alegra el alma.

Pero por fin llegó el momento en que tú ya no pudiste ocultar lo que sentías por mí, de momentos me ilusionabas y me decías que me querías en tu vida, y de repente cambiabas de opinión y me hacías llorar, así una y otra vez, hasta que me di cuenta que en realidad TU DESEAS UNA VIDA CONMIGO, solo que tenías miedo a enfrentar al mundo, tenías miedo a lo que pudiera pasarle a los demás si tu decidías por vez primera hacerle caso a tu corazón y buscar tu felicidad, pero en realidad me querías a tu lado, y pude estar más seguro de tu amor por mí, desde ese primer increíble, especial y maravilloso beso que nos hizo a los dos subir al cielo y fue el momento en el que nuestras almas pudieron por primera vez sentirse la una a la otra y se estremecieron intensamente, ese beso me demostró que en realidad tu si querías estar a mi lado, la verdad desde que me confesaste estar enamorada de mí, mi alma y corazón son inmensamente felices.

Me duele mucho no poder tenerte para mí, porque eres una mujer con compromiso, ojala y pronto arregles tu situación de la mejor manera, porque sé lo importante que son para ti tus hijos, por eso quiero que pelees por ellos, que tengas la satisfacción de haber peleado por ellos hasta el final, independientemente de quienes se vayan y quienes se queden contigo, y no perderé nunca  las esperanzas de algún día poder vivir una vida a tu lado, quiero una vida a tu lado, me encantas, me fascinas TU ERES LO QUE YO QUIERO PARA MI, quiero una vida a tu lado, quiero hacerte feliz, quiero que mis buenos y malos momentos de la vida sean junto a ti, a tu lado.

Anhelo ansiosamente poder hacerte el amor, poder caminar contigo de la mano, poder despertar a tu lado, poder reír a tu lado, poder llorar a tu lado, escuchar tu voz a todas horas del día, poder besarte, abrazarte y acariciarte a cualquier hora del día, poder ir a todas partes contigo, poder ver muchos atardeceres a tu lado, poder disfrutar de las cosas buenas de la vida a tu lado, poder enfrentar las cosas malas de la vida a tu lado, SOLO DESEO ESTAR SIEMPRE A TÚ LADO, TE QUIERO CON TODAS LAS FUERZAS DE MI ALMA… Si algún día, dudas de mi amor por ti, recuerda lo que te dije en este escrito, y si es necesario vuélvelo a leer… Siempre te esperaré y siempre te amaré…

Si pudiera retroceder el tiempo

Si pudiera retroceder el tiempo, andaría silenciosamente por las manecillas del reloj, procurando que marchen a la misma velocidad. Querría, como he querido a todos aquellos amores que conocí, y que viven ahora en lo más profundo de mi corazón. Besaría, los mismos labios una y otra vez, porque cada persona que se ha cruzado en mi camino representa una etapa de mi vida. Caería la misma cantidad de veces, porque todas esas batallas ganadas y perdidas, me han dado la fuerza y el coraje para no dejarme vencer.

Si pudiera retroceder el tiempo, aceptaría el camino que me ha tocado vivir a lo largo de todos estos años. Acariciaría los mismos cuerpos desnudos con los que he estado en la intimidad de la alcoba y en la clandestinidad de la casualidad. Haría el amor con la misma pasión de la primera vez. No me reprocharía nada, porque de cada episodio he tomado todo lo bueno. Me atacaría de risa y lloraría por las mismas razones, porque detrás de cada sentimiento hay una historia de alegría y de tristeza que de vez en cuando vale la pena recordar. 

Si pudiera retroceder el tiempo, no quitaría ni puntos ni comas a la historia que he escrito desde el momento en que vi la luz del mundo. Perseguiría la igual cantidad sueños y los cumpliría como lo he hecho siempre. Desearía mi esencia y la naturaleza de mi persona, porque a pesar de todo lo bello y lo amargo de mis días, quiero seguir sosteniendo el mismo equipaje que se me ha entregado. Sin hurtar y olvidar nada, me detendría en las estaciones marcadas del tren de mi destino, y gritaría en el trayecto, que si pudiera retroceder el tiempo, sería, simplemente yo.

La primera vez

La primera vez que sentí que te amaba, fue allá por los primeros días de Junio del 2015, no nos habíamos visto en ese fin de semana, y te ausentaste por algunos días, casi al instante, me hiciste falta, y habitaba en mí una enorme necesidad de tu presencia, por primera vez, desde que te conocí, sentí que un sentimiento nuevo nacía. 

La primera vez que quise decirte que te amaba, fue en aquél restaurant al que fuimos por la tarde, tu manera de tomar los cubiertos, tu delicadeza al comer, tu aroma de Vivir y las palabras que me dirigiste al susurrar un secreto tan personal, fueron suficientes para motivar el amor que ya vivía en mi corazón. 

La primera vez que te dije que te amaba, fue en nuestro primer viaje a Acapulco, la intimidad que nos dio la soledad de nuestra compañía, ir a la playa, el dormir a tu lado y el saber intimidades el uno del otro, provocaron que mi alma hablara por sí sola, y en ese escenario tan mágico a mis ojos, por primera vez, te dije que te amaba.

Deseos de media noche

Cuando caiga la noche, estaré contigo. Espera por mí en el dintel de tu ventana. Cierra los ojos y extiende los brazos. Quizá, viaje entre estrellas del cielo nocturno para llegar a ti. Quizá, me aventure temeroso entre la corriente del sereno. Quizá, una cometa me lleve entre sus destellos hacia tu presencia. 

Cuando la noche cubra de rocío los nardos, estaremos juntos. Dormitaremos en tu alcoba. Te arroparé en mi regazo y menguaré el frío de tu piel con el calor de mi corazón. Yo estaré ahí, tomaré tus manos y desaparecerá la soledad de  nuestra ausencia. Habrá silencio, y en esa calma, seré parte del aroma de tus cabellos. 

Cuando la noche haya derrotado triunfante al sol, aguarda el arribo de mis pasos. Pero si el tiempo transcurre, y el letargo vence tu fuerza, duerme. Me quedaré a tu lado y velaré tu reposo. Yo te llevaré a lo más profundo de la realidad de los sueños que juntos hemos construido, y no me separaré de ti, nunca más.

A ti que me amaste

Una parte de mi amor quedó allá, entre las cuatro paredes del hotel que fue el nido de nuestras visitas nocturnas. Quedó, entre nuestros besos, en las caricias a mi cuerpo. Vive, en el rocío de los amaneceres y aún respira en los valles de los campos que se cubrían de colores galantes con nuestra presencia. Existe, en la azotea de tu casa iluminada por la luz de la luna. Habita, en el tráfico de la ciudad; en sus calles, en sus aceras, en los parques, en el subterráneo…

Si, una parte de mi amor, de mi espíritu, todavía aguarda en el balcón donde esperaba tu llegada al anochecer. Duerme, en la intimidad de lo que una vez fue mi habitación, entre las sabanas que cubrían mi cama, en la ducha, en la sala. Mis ojos, continúan buscándote. Mi piel, aún dormita serena esperando el aliento de tu boca sobre ella. Y mi corazón, que fue amado por rostros desconocidos, sigue latiendo para hacerme recordar que lo más importante que aprenderé en la vida es: A AMAR.